Nacido en Barcelona, estudió piano con el maestro Alexandre Ribó y armonía y composición con Enric Morera.
Con dedicación desde joven a la dirección, fue subdirector del Orfeó Gracienc, donde colaboró con el maestro J. Balcells. Seguidamente se trasladó a Santiago de Cuba, de donde fue llamado para fundar y dirigir el Conservatorio de Música de dicha ciudad. Al volver a Barcelona, en 1932, fue profesor de música en el Instituto Escuela de la Generalitat y asimismo profesor de estética en el Conservatorio del Liceo.
A partir de 1939 se dedicó durante unos años a la enseñanza particular. Posteriormente fue profesor de la Escuela Isabel de Villena, y también director de la Schola Cantorum Universitaria, cargos que ocupó a lo largo de más de veinte años.
Ha dejado numerosas armonizaciones de canciones populares de todo el mundo que en la actualidad forman parte del repertorio de todas la corales de Catalunya.